LMA 3

LMA 3
La vida que habían vivido hasta ahora había sido peligrosa pero nunca se sentaron a ver lo que sucedía, sino que participaron activamente en todo ello. Ahora tenían que reconstruir sobre las cenizas de la tristeza y de la pérdida, y para poder seguir tenían que comenzar todo de nuevo. Nunca nada sucede como suponíamos o como teníamos previsto pero siempre el universo nos brinda una nueva oportunidad. La vida les había dado mil razones para llorar pero ahora se disponían a encontrar otras mil para reír, debían dejar descansar a los que se habían ido pero siempre tendrían un lugar en el recuerdo y en el corazón de todos, y disponerse a comenzar… Una nueva vida

viernes, 25 de julio de 2014

Cap. 43 ¿Y dónde está ahora?



Danny y Diandra estaban a punto de entrar al Dver cuando Samantha casi cayó en brazos de su gemelo.

-         ¿Sam?  -- dijo muy sorprendido  --  ¿Qué sucede? ¿Qué…?

Pero las palabras murieron en sus labios. Su hermana lloraba en sus brazos como una niña asustada. Se alarmó y miró a Di buscando ayuda pero la chica estaba igual de asombrada y a punto de largarse a llorar también al ver a su cuñada así. Danny trató de pensar con serenidad e intentó mirar en los pensamientos de su hermana, pero allí reinaba el caos, de modo que tan suavemente como pudo la llevó hasta un sillón, pero la chica se resistía a soltarlo.

-         Sam por favor, quiero ayudarte, pero dime qué sucedió

-         Giulian…  --  logró decir entre sollozos

Danny y Diandra se alarmaron, porque para que Sam estuviera en ese estado debía haberle ocurrido algo realmente grave a Giulian. Danny pensó en enviar un mensaje  a sus padres para pedir información pero Sam lo detuvo antes de que pudiese hacerlo

-         ¿Qué?  Solo voy a…

-         Ya sé lo que vas a hacer  --  le dijo

-         ¿Sam, dime qué sucedió? ¿Qué le paso a Giulian?

Sam cayó en la cuenta de que su hermano no sabía nada. Cuando se metió al Dver no tenía un rumbo fijo, solo quería desaparecer de allí y lo único que le vino a la mente fue su hermano. Ahora se enfrentaba al hecho de tener que dar explicaciones y la súbita necesidad de enfrentar a Danny la hizo calmar su llanto. Pensó en la mejor manera de decírselo pero no había ninguna, de modo que solo lo dijo.

-         Danny, estoy embarazada  --  por un momento él pareció no haberla entendido

-         ¿Qué… tú… qué?

-         Ya me escuchaste, estoy embarazada.

Pocas veces en su vida Danny se había sentido tan perdido como en aquel momento. Su cabeza experimentó el mismo caos que vio en la de su hermana. Sam por su parte pensó que Danny se desmayaría igual que Giulian, pero simplemente estaba como petrificado, ni siquiera parpadeaba.

-         ¿Danny?

Pero él seguía intentando poner orden en su cerebro. Sam estaba embarazada, eso lo entendió, pero algo no le cuadraba. Revisó a toda velocidad lo que sabía de la relación de su hermana y Giulian. Sam lo amaba y Giulian la amaba, ergo, quería casarse con ella. Llevaba tiempo escuchando la historia. ¿Por qué maldita razón Sam se negaba a casarse? Y ahora esto. Cuando decidió hablar, se sorprendió de la serenidad de su propia voz.

-         Samantha, te juro que estoy tratando entender, Giulian lleva mucho tiempo intentando  casarse contigo. Si ayer me hubieras dicho que querías dejarlo porque ya no lo amabas o que te habías equivocado o qué se yo, lo habría entendido. Pero ahora estas esperando un hijo suyo, no puedo creer que él haya huido por eso, por lo que solo puedo pensar que has sido tú la que ha salido corriendo  --  hizo una pausa y la sujetó por los hombros  -- Sam mírame ¿qué es lo que pasa?

-         No es tan fácil Danny. Sí, es verdad que ya me había pedido que nos casáramos, pero no lo hizo porque en realidad quisiera, lo hizo porque Anne  --  dijo mirando a Di  --  le dijo que debía hacerlo.

-         Sam eso es ridículo  --  dijo Diandra que hasta ese momento había permanecido en silencio – Giulian te ama y todos sabemos eso

Danny tuvo un desagradable presentimiento y esperaba estar equivocado.

-         ¿Sam, al menos lo sabe? ¿Sabe que va a ser padre?

-         Sí, se lo dije esta mañana.

-         ¡Por todos los Dioses,  Sam!  ¡Ese hombre debe estar desesperado buscándote!

-         Debes volver Sam  --  dijo Diandra

-         No  --  dijo con obstinación  --  ahora solo quiere casarse conmigo porque mi padre lo mataría.

-         Sam, sabemos que papá no…

-         Pues espero que lo haya hecho pedazos  --  y comenzó a llorar de nuevo.

Danny no sabía qué hacer. De lo último que había dicho su hermana podía deducir que sus padres ya estaban al tanto de la situación.  Miró a Diandra y ella entendió el mensaje. Se disponía a salir del salón pero Sam la detuvo.

-         No lo hagas  --  le dijo con una mirada escalofriante y ambos la miraron y se miraron  --  No quiero ver a nadie  --  agregó

-         Sam, te estas comportando de forma irracional  --  dijo Danny

Sam guardo silencio, lo miró por varios minutos sin decir nada y aunque Danny intentaba con todas sus fuerzas ver qué estaba pensando, ella había levantado un sólido muro que se lo impedía.

-         De acuerdo, solo déjame tranquilizarme y volveré a casa.

Se levantó para dirigirse al Dver y Danny la siguió.

-         ¿No dijiste que ibas a esperar un poco?

-         Sí, pero no aquí, quiero caminar.

-         Voy contigo  --  dijo en seguida el chico.

-         No Danny, quiero ir sola.

-         No voy a permitirte hacer eso  --  dijo el otro con disgusto

-         No me obligues a detenerte.

Danny estaba librando una batalla interior. Si la dejaba ir sola nada le garantizaba que regresaría. Aparte de cualquier posible peligro que pudiera correr, si algo le sucedía él no podría perdonárselo y ahora sí con toda seguridad sus padres y Giulian lo matarían por haber cometido esa estupidez.

Sam pudo ver con sorprendente claridad todo lo que él estaba pensando. No quería hacerle daño a su hermano, de modo que decidió hacerlo de la forma menos violenta posible y mientras Diandra corría hacia Danny al verlo caer, Sam desapareció.

Después de haber hecho volar violentamente la puerta y encontrase con que Sam no estaba, Giulian bajó furioso al salón, Iván venía entrando en ese momento y se sorprendió al ver las expresiones de todos.

-         ¿Qué está sucediendo?  --  preguntó

-         Ahora no tengo tiempo para perderlo explicándotelo  --  fue la respuesta de Giulian

-         ¿A dónde vas?  --  preguntó Dan.

-         ¿A dónde crees?  Seguramente se fue al Instituto y cómo comprenderás, aparte de tener que  hablar con ella no puedo permitir que en su estado siga participando en el Club.

Iván pensó que no había que ser un genio para entender lo que estaba sucediendo. Sam había dado la noticia de su embarazo y por alguna razón había causado este caos. Todos entraron al Dver con rumbo al Instituto, pero Iván estaba seguro que ella no estaba allí, sin embargo nada dijo, porque fuese cual fuere la razón de Sam para desaparecer, él pensaba que sería mejor darle algo de tiempo para pensar. No obstante, estaba igualmente seguro que nadie lo escucharía y Giulian menos que nadie. Se fueron directamente al lugar donde se llevaban a cabo las prácticas y no había señales de ella. Gail y Aderyn se acercaron  y en seguida notaron que algo no iba bien. Sam no estaba con ellos y Danny tampoco, parte de que Iván venía en el grupo

-         ¿Han visto a Samantha?  --  fue el saludo de Giulian

Sorprendidos, ambos contestaron que no y Aderyn tuvo una idea bastante aproximada de lo que podía estar ocurriendo, pero la furia que veía en los ojos de Giulian la desconcertó. Intentó con Iván pero él se limitó a hacer un gesto negativo

-         ¿Y a Danny?  --  preguntó Amy

-         Danny tampoco ha llegado  --  le contestó Gail.

Con toda certeza supieron que Sam estaba con él. Giulian echó andar de nuevo hacia donde se encontraban los diferentes Dvers del Instituto.

-         ¿A dónde vas?  --  le preguntó Dan

-         A buscarla  --  fue la seca respuesta del otro.

-         No estamos seguros de que esté allí  --  dijo aún sabiendo que existían pocas posibilidades de estar equivocado  -- Envíale un mensaje a Danny primero.

-         Yo estoy seguro de que está con él y no soy tan necio como para alertarla de mi llegada.

Partieron con destino a la casa de Danny y cuando Giulian salió, lo primero que vio fue al chico tendido en el suelo y a Diandra junto a él

-         ¿Dónde está?  --  preguntó Giulian pero Di no le prestó atención ocupada en reanimar a Danny

Cuando recuperó el conocimiento y los vio a todos allí, sintió que una mano helada le apretaba la garganta. Sam había escapado.

-         ¿Dónde está?  --  repitió Giulian

-         No lo sabemos  --  dijo Diandra  -- atacó a Danny y se fue

Amy se llevó una mano a la boca porque la idea de su hija atacando a su hermano la superaba. Danny miró molesto a Diandra.

-         No me atacó,  solo me apartó de su camino… con delicadeza

-         ¿Tienes idea de a dónde pudo haber ido?  --  preguntó su padre

-         No  --  y de verdad no tenía ni idea.

Giulian estaba dividido entre la rabia por la necedad de Samantha y la angustia de que algo pudiera ocurrirle. Dan sin embargo, tenía esperanzas de que su hija recapacitara y regresara lo antes posible. Amy no sabía ni qué pensar, solo se sentía muy angustiada. Diandra estaba molesta por lo que había hecho su cuñada pero también muy preocupada. Gail no entendía nada e Iván se mantenía al margen.

-         Todo esto es por lo del embarazo ¿verdad?  --  preguntó finalmente Aderyn

-         ¿Tú lo sabías?  -- le preguntó un indignado Danny, mientras Gail en medio de la sorpresa, tenía ganas de ahorcar a su mujer

Todos la miraban y ella buscó la mirada de Iván. Giulian interpretó acertadamente esa mirada y ya se estaba volviendo enfurecido hacia su amigo cuando Aderyn volvió a hablar.

-         Sí, yo la acompañe al hospital.

-         ¿Al hospital?  --  preguntó asustado Giulian  --  ¿Por qué?

Una serie de aterradoras imágenes pasaron por su mente. ¿Algo no iba bien con el embarazo?

-         Pues… ¿cómo que por qué?  --  se extrañó Aderyn 

-         Fue a buscarme para confirmar lo del embarazo  --  intervino Iván

Giulian pasó de la angustia a la rabia nuevamente mientras todos miraban a Iván con distintos niveles de asombro o indignación, según fuese el personaje en cuestión.

-         ¡Eres un mal nacido!  --  le gritó Giulian  --  ¿Por qué no me lo dijiste?  --  y ya se iba hacia él cuando Dan lo detuvo

-         En primer lugar, porque no me correspondía a mí hacerlo, y segundo, porque aunque hubiese tenido intenciones de hacerlo y no las tenía, apenas me enteré ayer por la tarde  --  le dijo

-         ¿Giulian, qué sucedió?  --  preguntó Aderyn  -- Ayer estaba feliz con la idea de tener a tu hijo creciendo en su vientre.

Giulian sintió que algo muy frío recorría su cuerpo. Se la pudo imaginar fácilmente con su alegría casi infantil por la noticia. ¿Y qué había hecho él?

-         ¡Maldita sea, tengo que encontrarla y rápido!

-         ¿Giulian?  --  ahora fue Danny

-         Esta mañana cuando me lo dijo, yo cometí lo que supongo fue el error de mencionar nuevamente lo del matrimonio, reconozco que quizá debí esperar para insistir en ello teniendo en cuenta que hasta ahora se ha negado con vehemencia a casarse, pero no lo hice porque esté embarazada, lo hice y lo he estado haciendo porque la amo.

Danny y Di se miraron y ambos pensaron que era hora de que Giulian supiese lo que pensaba Sam.

-         Giulian, ella cree que tú le has estado pidiendo que se case contigo solo porque Anne te lo dijo. No sé cómo se enteró de eso pero ha sido la razón de su negativa.

Giulian lo miró incrédulo. Recordaba la conversación que había tenido con Anne pero ella no hizo más que acelerar algo que ya él había planeado, solo que tenía miedo de la respuesta.

-         ¡Pero ya se los he dicho, yo la amo! ¡Esa es la única razón!

-         Eso ya lo sabemos  --  dijo Aderyn  --  ¿pero en verdad no pasó nada más?

-         No, nada más.

-         Quizá no fue lo que dijiste sino el cómo lo dijiste  -- dijo Gail con su habitual forma directa de decir las cosas

Fue uno de esos extraños y eventuales razonamientos que por su simpleza resultaban acertados. Giulian lo pensó un momento y llegó a una rápida conclusión.

-         Tal vez tengas razón,   quizá no debí mencionar “matrimonio y Dan” en una misma frase.

Y les contó con exactitud cuáles fueron sus palabras, al menos como podía recordarlas.

-         Realmente eres un imbécil Giulian  --  dijo Dan  --  mira que decir semejante idiotez.

-         Es evidente que no tienes ni la más peregrina idea de cómo pedirle matrimonio a una chica  --  dijo Amy

-         Puedes acusarme de muchas cosas Enana  --  dijo él  --  pero de lo que ciertamente no puedes, es de tener mucha experiencia pidiendo matrimonio.

Un asomo de sonrisa llegó a los labios de Danny pero recordó el problema  en el qué estaban y que debían encontrar a Sam. Propusieron cualquier  cantidad de lugares pero ninguno les parecía muy probable. Aún así decidieron ir a comprobarlo y Danny  miró a su mujer, pero Diandra lo interrumpió antes de que él pudiese decir lo que estaba segura que diría.

-         No me voy a oponer a buscarla, pero si ella no quiere ser encontrada no podremos hacerlo.

Iván estuvo de acuerdo en que nunca se habían dicho palabras más ciertas. Sin embargo, de nuevo fue Gail quien propuso lo más acertado.

-         En esas circunstancias, los únicos que podrían hacerlo con alguna posibilidad de éxito serían Garlan y el cachorro, y de hecho, él querrá quitarnos la cabeza a todos por no haberlo llamado de inmediato

-         ¡Demonios!  --  exclamó Danny y antes de que nadie dijese o hiciese nada más, le envió un urgente mensaje a Mael.


Mael estaba dándole unas últimas instrucciones a Paul antes de salir para Averdeen como lo había venido haciendo todos los sábados. Él sabía que a esa hora todos habrían partido hacia el Instituto y él aprovechaba la mañana para pasarla con los niños, y en la tarde solía llevarse a Elijah de paseo.

-         Es solo rutina  --  le estaba diciendo al Kriger  --  todos deben estar de vuelta a más tardar a final de la tarde, pero si llegase a presentarse alguna emergencia, acude a Alaric, él estará aquí.

-         Anda tranquilo, yo me encargo  --  dijo el chico

-         Bien, estaré de vuelta a eso de…

Pero se interrumpió de súbito y antes de que Paul tuviese ocasión de preguntar nada, ya Mael había desaparecido.

Cuando Sam salió de la casa de Danny, estaba en la misma situación que cuando abandonó la suya, con el añadido de que se sentía terrible por haber atacado a su hermano. En alguna parte de su cerebro seguía repitiéndose lo que le había dicho Danny con respecto a que Giulian la amaba, pero ese mismo y terco cerebro se negaba a aceptarlo. La desesperación la superó de nuevo en cuanto abandonó a su hermano y solo le vino un nombre a la mente, y más tardó ella en pensarlo que él en hacer veloz acto de  presencia.

Sam había pensado en Mael llevada por la desesperación, pero era algo lógico porque él siempre había sido su apoyo en momentos difíciles. Sin embargo, apenas lo hizo comenzó a cuestionarse la conveniencia de ello pero no tuvo ocasión de ir más allá, porque casi de inmediato él estaba frente a ella.

En el brevísimo lapso de tiempo que empleó en llegar hasta Sam, Mael había sentido miedo, dolor y una desesperación infinitas, y cuando la vio, todos esos sentimientos se confirmaron de manera inequívoca al comprobar en un rápido vistazo, las condiciones en las que estaba. Sam por su parte en cuanto lo vio, olvidó lo que había estado pensando y cayó en sus brazos hecha un mar de lágrimas.

-         Nena  --  dijo él con la mayor suavidad posible  --  no importa de lo que se trate, vamos a salir de ello, te lo prometo

Pero lejos estaba él de saber de lo que se trataba y Sam no dejaba de llorar. Afortunadamente Mael era poseedor de una paciencia infinita y se limitó a sostenerla en sus brazos mientras ella lloraba con desconsuelo. Al cabo de unos minutos de un llanto que parecía inagotable, sintió que ella se serenaba un poco, o al menos lloraba de forma menos convulsiva.

-         ¿Quieres contarme lo que sucedió?  --  preguntó y ella negó con la cabeza aun enterrada en su pecho  --  De acuerdo, si solo quieres compañía aquí estaré, pero si me crees merecedor de tu confianza, también te escucharé

-         Mael…  --  pero las palabras se agolpaban en su garganta tejiendo un nudo imposible de atravesar

-         Tranquila Nena, estás conmigo y nada va a sucederte

Había dicho aquello, porque aunque se había propuesto no invadir sus pensamientos, resultaba inevitable percibir sus emociones y había sentido con toda claridad el miedo, pero se preguntaba miedo a qué exactamente.

-         Mael  --  dijo ella después de un rato

-         ¿Sí?

-         Mael estoy… embarazada

Aunque no era un secreto para Mael la relación existente entre Sam y Giulian, nada lo habría preparado para aquello, ni para el dolor sin nombre que experimentó y que fácilmente podía asociarse con la imagen de un corazón partiéndose a la mitad. En algún recóndito lugar de su mente y de aquel corazón que ahora estaba hecho pedazos, él había conservado la esperanza, pero ésta quedó suprimida de golpe. Ahora estaba seguro que la había perdido para siempre.

Sin embargo, y haciendo un inhumano esfuerzo, se sobrepuso a su propio dolor y se concentró en lo inmediato, y lo inmediato era ella.

-         Nena, supondría que esto debería ser un motivo de alegría, de modo que…

Pero Sam no lo dejó concluir y se vio contándole todo lo que había estado sucediendo, desde su punto de vista, lógicamente. Le dijo que era verdad que ella amaba a Giulian pero que no estaba tan segura de que él la amase a ella, y que si bien era cierto que le había pedido que se casasen, primero lo había hecho porque Anne le había dicho que eso era lo correcto, y ahora porque sus padres lo matarían si no lo hacía.

Todo esto y bien mirado, era un absurdo de proporciones descomunales, porque quien conociese a Giulian Cornwall, sabría de cierto que nadie lo obligaba a nada aunque su vida dependiese de ello. Pero Sam era joven, terca y estaba especialmente vulnerable. Y en el caso de Mael, aunque por la periferia de su mente saltase como fuegos artificiales lo ilógico del asunto porque todos sabían que Giulian amaba a Samantha, él la amaba también de forma ciega, y si Sam le hubiese dicho que toda su vida había estado equivocado y que el cielo era en realidad rojo y no azul, él habría estado dispuesto a creerlo. De modo que experimentó una ira igualmente ciega y su mayor deseo en aquel momento era hacerle el mayor daño posible a aquel estúpido desgraciado, y se juró que le pagaría con sangre cada una de sus lágrimas.

Sin embargo y de momento, hizo a un lado su sed de venganza y volvió a concentrarse en Sam, era imperativo ponerla a salvo de ella misma. Ya estaba claro en que lo único que ella quería era huir, pero él no podía dejarla sola en aquel preciso momento, aparte de lo emocionalmente mal que estaba, en cualquier momento el agotamiento físico y mental iban a vencerla.

-         Nena, debes descansar un poco…

-         No voy a volver a casa  --  dijo con terquedad

-         No estoy sugiriendo que lo hagas, pero no puedes quedarte aquí, y no vas a estar vagando por allí

-         Pero no tengo a dónde ir, todos querrán…

-         Sí, sí tienes  --  le dijo él

Sam lo pensó un momento y súbitamente supo a dónde podía ir, recordó con claridad ciertas palabras que le habían dicho hacía mucho tiempo “…estas puertas permanecerán abiertas para ti siempre, y estos muros te ofrecerán un refugio cuando lo necesites”.

Danny y Gail habían enviado mensaje a Mael pero había resultado insólitamente imposible comunicarse con él. Pensaron que estaría en algún lugar protegido tal vez en algún ejercicio y por eso no los estaba recibiendo, de modo que Danny se volvió a sus padres.

-         Creo que debemos hablar con Garlan, porque Gail tiene razón, es el único que…

-         No, no es el único. Hay más Arzhaelíes con sus mismas capacidades como Iwerd por ejemplo  --  lo interrumpió Giulian

-         Giulian, no estamos como para que te pongas con tus celos ahora  --  dijo Amy  --  quiero encontrar a mi hija y quiero hacerlo ya mismo, y sabes tan bien como todos nosotros que Garlan es el mejor.

Todos miraron con cierta sorpresa a Giulian, porque solo a él podía ocurrírsele estar celoso de Garlan, eso suponiendo que Amy estuviese en lo cierto, ya que todos sabían la antipatía que se tenían Garlan y Samantha, de modo que era una de las cosas más absurdas que habían escuchado.

En cualquier caso estaban discutiendo el llamarlo, cuando la figura de Jonathan se hizo presente frente a Giulian.

-         ¿Se puede saber qué sucede infeliz? Vine a ver la exhibición de Duelo y ni tú ni nadie apareció ¿Está todo bien?

Aderyn envió un rápido y críptico mensaje a su hermano, avisándole de la desaparición de Sam y mientras los demás discutían si llamar o no a Garlan, Jonathan apareció allí con cara de preocupación. Cuando recibió la contestación de su hermana, lo primero que pensó fue en el desgraciado del hijo de Bastian, de modo que se dio la mayor de las prisas en acudir.

-         ¿Y bien?

Pero nadie parecía muy dispuesto a decir nada, de modo que se fue derecho hacia Giulian, pero apenas había dado unos pocos pasos, cuando fue lanzado violentamente contra la pared. Inicialmente tuvieron cierta dificultad en entender lo que estaba sucediendo, pero cuando lo hicieron otro enorme terror se apoderó de ellos, porque vieron a Mael sobre Giulian a quien había tirado al piso y ahora apretada su garganta.

Todos pensaron que estaban en verdaderos y grandes problemas, Mael era rápido, fuerte y letal, y la única persona que podía detenerlo sin necesidad de emplear la fuerza, era justamente la que no estaba. Y al mismo tiempo pensaron que si Mael estaba allí y a punto de matar a Giulian, era porque sabía lo sucedido, por tanto él sabía dónde estaba Samantha. Todo esto pasó a la velocidad de la luz por las cabezas de los presentes y todos se abalanzaron hacia ellos en un intento por detener la masacre que estaba sucediéndose ante sus ojos.

Ya Giulian tenía la cara hecha una pena, Iván se debatía entre causarle el mismo daño que ya le había provocado en una anterior ocasión a Mael, y la necesidad de proteger la vida de Giulian. Pero aunque pidiéndole perdón internamente a Mael intentó el mismo método, aquel chico nunca decía nada que no fuese a cumplir, y tal y como había dicho, estaba preparado para no dejarse abatir. De modo que Iván no tuvo ningún éxito.

La fuerza combinada de Gail e Iván, tampoco estaba teniendo éxito y nadie quería atacar a Mael, pero si no lo hacían y pronto, iba a matar a Giulian. Jonathan no entendía lo que estaba sucediendo pero igual estaba ayudando a Danny y a Dan en su intento por apartarlos, algo del todo inútil en su opinión, porque si no podían los Natchzhrer, ellos tenían muchas menos posibilidades, algo que quedó demostrado cuando fueron violentamente apartados por el furioso Mael.

-         Te… advertí… que si volvías… a hacerle… algún daño… te mataría  --  con cada palabra que decía, Mael descargaba un golpe

-         ¡Mael, tú no eres un asesino!  --  le gritó Diandra desesperada

-         ¡Cachorro por favor, él la ama, todo es un mal entendido!  --  intentó Aderyn con lágrimas en los ojos

Diandra y Aderyn se miraron y con inmenso dolor por lo que iban a hacer, apuntaron sus Athames hacia Mael, porque preferían enviarlo al hospital y que él enfureciese con ellas, a que terminase en Fangelsi por matar a Giulian.

-         ¡No!  --  gritaron Gail y Danny al ver que las chicas lanzaban unos aterradores rayos hacia Mael, pero a pesar de que ciertamente lo habían herido, él seguía destrozando a Giulian

Iván por su parte y con el mismo dolor en el alma, le dijo lo único que consideró que podía detenerlo, porque Giulian ya estaba inconsciente y Mael seguía golpeándolo.

-         ¡Mael,  Samantha lo ama y no te perdonaría nunca que mancharas tus manos con la sangre del padre de su hijo!

Aquello pareció tener el efecto esperado, porque Mael lo soltó y se levantó aunque seguía mirándolo con el mayor desprecio y un odio aterradoramente frío brillaba en sus ojos esmeralda. Una vez que lo soltó, Amy y Dan se abalanzaron sobre el cuerpo inerte de Giulian, e Iván avanzó hacia Mael al ver la sangre manando de las heridas que le habían ocasionado las chicas.

-         Hijo…

-         Asegúrate de que sepa que por esta vez te debe la vida, pero que si hay una próxima, aunque me gane el odio y el desprecio de la Nena, no tendrá tanta suerte  --  dijo impregnando cada sílaba de una ira mal contenida

-         Mael, Sam…

Pero Danny no tuvo oportunidad de completar la frase, porque Mael había desaparecido.


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