Sam fue a ver a los niños, y se entretuvo un buen rato
con ellos, tanto Elijah como Brendan habían enloquecido al verla.
-
¡Mami! -- exclamaron ambos chicos en cuanto ella entró
-
¿Cómo están mis príncipes?
-- preguntó ella abrazándolos
Después que los chicos la habían besado e intentado
contarle lo que habían estado haciendo, Elijah se quedó mirando a su madre.
-
Mami, Brendan y yo vamos a portarnos bien -- le
dijo con mucha seriedad
-
Mami no va más -- dijo Brendan
Sam se sintió
terriblemente mal, porque entendió que por algún motivo los niños se sentían
culpables de su ausencia.
-
Ustedes son maravillosos -- les dijo
-- y mami solo se irá cuando deba
trabajar o estudiar
Los niños se quedaron más tranquilos y ella fue a
saludar a su madre, después de lo cual
se fue a su habitación. Pensó en
Giulian y se enfureció de nuevo, pero se preguntaba por qué estaba tan furiosa.
Se había prometido a sí misma que lo ignoraría como él la había ignorado a ella
durante todos esos meses.
Después de la comida, Sam le preguntó a su madre si
podían hablar un momento. Así que ambas subieron.
-
¿Qué te pasa, cielo?
-
Mamá, algo extraño me está pasando, se trata de mis poderes, hasta los
conjuros más sencillos me cuesta trabajo realizarlos correctamente.
Amy se quedó pensando un momento y miró a Samantha
como evaluándola. Quizá su hija estaba más unida a Dan pero no por eso ella
había dejado de notar que no era feliz. Además estaba demacrada y tenía aquella
tos incesante. Antes de la comida le había dado algo pero no había surtido ningún efecto.
-
¿Todo marcha bien con Casander?
-- le preguntó
Sam se quedó pensando un momento y decidió que mejor
era decirle la verdad, o parte de ella, en cualquier caso tendría que informar
a su familia que había terminado su
relación con Casander.
-
A decir verdad mamá, hemos terminado. Las cosas no han estado marchando
muy bien desde hace un tiempo y consideramos que era mejor dejarlo. ¿Pero
qué tiene que ver eso con lo que te
dije?
-
Lamento escuchar eso Samantha ¿Estás segura de que hiciste lo correcto?
¿No es solo una pelea de novios? Tu padre y yo…
-
Sí mamá, estoy segura.
-
Bueno -- dijo Amy suspirando -- eso podría tener mucho que ver, porque
cuando pasamos por una situación particularmente difícil, emocionalmente
hablando, pueden verse afectados nuestros poderes y disminuida la capacidad
para efectuar cualquier clase de magia.
-
Mamá, pero -- Sam trataba de
ordenar sus ideas, para no despertar sospechas en su madre -- ¿Por qué ahora? Quiero decir, si ya
teníamos conflictos desde hacía meses, ¿por qué justo ahora es que tengo
problemas?
-
Bueno Samantha, primero debes tener en cuenta que no para todos funciona
igual, y hay casos en los que podemos pasar por grandes crisis sin que nuestros
poderes se vean afectados mientras que en otros con una pérdida repentina como
la muerte de un ser querido, sí podrían verse
afectados. En otros casos como el sufrimiento prolongado, también puede suceder
que haya disminución o pérdida de poderes.
Amy observaba a su hija con atención pensando que si
tanto la afectaba el haber roto su relación con Casander, entonces quizá se
habían apresurado. Tal vez las cosas podrían tener arreglo. Aunque siempre le
había parecido que su hija no estaba tan enamorada de su novio, lo que estaba
ocurriéndole cambiaba por completo su apreciación.
-
No te preocupes linda --
dijo -- Una vez que superes el dolor de
la pérdida, recuperarás tus poderes.
-
Gracias mamá -- le dijo y salió
Cuando iba camino a su habitación se sintió furiosa de
nuevo, Giulian Cornwall ya le estaba costando mucho. Primero le robó la
tranquilidad, le robo la felicidad y ahora le estaba costando también sus
poderes, genial.
Pasó toda la tarde en su habitación y cuando Crappy le
anunció que iba a servirse la cena, le mandó a decir a sus padres que la
disculparan pero que no tenía hambre. Cuando llegó Mael, subió directamente a
su habitación y la encontró en la cama.
-
¡Nena! -- exclamó y ella se incorporó en la cama --
¿Qué te sucede? Tu madre me dijo que te sentías indispuesta
-
No es nada -- dijo después de saludarlo -- se
trata solo de un resfriado
-
¿Está segura? ¿Ya Iván te revisó?
-
No, pero estoy segura que es solo eso
-- le aseguró -- ¿Y
tú dónde estabas?
-
Eowaz y Alaric querían hablar conmigo, se supone que los miembros del
Consejo no pueden tener a su cargo la instrucción de los aspirantes, porque eso
significa estar todo el tiempo en la Sede, pero siendo que no hay ninguna
amenaza grave en la actualidad, están pensando en la posibilidad de que me hago
cargo de la instrucción que antes impartía Alaric.
-
Pero eso significaría…
-
Sí Nena, tendría que irme a Arx en forma permanente -- le
dijo
-
¿Y vas a aceptar?
-
Aun no se ha decidido nada, en la próxima reunión del Consejo se
discutirá con todos y después veremos.
-
¿Y tú qué quieres? -- insistió ella
-
Haré lo que me ordenen -- dijo sin comprometerse
Estuvieron hablando un rato más y luego él el dio las
buenas noches y se marchó. Una vez en su propia habitación, soltó el aire.
Había sido una dura prueba mentirle de aquel modo pero era necesario. Después
que Sam se había marchado y sabiendo él los motivos, había decidido que si bien
lo último que quería era abandonarla, por su propia salud mental debía poner
cierta distancia. Él sabía que era cuestión de tiempo para que las cosas entre
ella y Giulian salieran a luz y se arreglaran, pero cuando eso sucediese, él no
podría quedarse, aquello equivaldría a someterse a un dolor muy superior al que
podría soportar y algo mucho más importante, debía preservar la integridad física
de Samantha y dada su naturaleza eso iba
a ser difícil . De manera que había hablado con Iván un par de días antes del regreso de Sam, había sido sincero
con él y obviamente Iván lo había comprendido, sugiriéndole aquella
alternativa. De ese modo podría venir a ver a su hijo los fines de semana pero
al mismo tiempo estaría lejos de ella. Por tanto, no era cierto que Eowaz se lo
hubiese planteado, era él quien lo había sugerido y ahora solo esperaba por la
opinión de los miembros del Consejo.
Sam se había quedado pensando con tristeza en lo que
le había dicho Mael, y sintió que cada
vez se quedaba más sola. Danny y Diandra se irían a vivir a su nueva casa, Gail
y Aderyn también, y ahora Mael también se marcharía. A pesar de que estuvo
mucho rato llorando, no se durmió tan tarde, pero despertó en medio de la noche
y tuvo la certeza de que Giulian estaba ahí.
-
Eádrom -- dijo pero la luz que había conjurado
apenas alumbró un poco y comenzó a extinguirse
-- ¡Maldita sea! --
exclamó -- ¡Vete
al demonio Giulian! -- pensó con irritación
Sam se acomodó en la cama y volvió a cerrar los ojos
no sin antes soltar otra maldición debido al acceso de tos que la atacó.
A la mañana siguiente Sam despertó porque alguien
estaba zarandeándola. Abrió los ojos y vio unos idénticos a los suyos.
-
¡Danny! -- gritó y se lanzó en sus brazos -- ¿Cuándo llegaron? ¿Dónde está Di?
-
Hola hermanita, yo también te
extrañé -- dijo el chico
-
Sabes que sí, te extrañé mucho.
-
Di está abajo con mamá y papá, supuse que Gail estaría aquí ya, pero
envió un mensaje diciendo que irían primero a la casa de los McKenzie. Levántate
para que desayunemos juntos -- le dijo mientras tiraba de las mantas --
¿Dónde está el cachorro?
-
Debe estar en Arx -- dijo ella con tristeza
-
¿Y qué hace allá?
-
Tenía asuntos que discutir con Eowaz, según me dijo
-
Bueno todos parecen muy ocupados, porque Iván tampoco está
Sam se levantó y se duchó a toda carrera, se vistió y
bajó. Saludó a una Diandra muy feliz y dio los buenos días a los demás.
Tuvieron un desayuno muy animado, siendo Giulian el más silencioso. Danny y
Diandra anunciaron que irían a la casa de los McKenzie para saludarlos y que
regresarían en la noche para la cena de cumpleaños de Giulian. Sam les preguntó
si podía ir con ellos, a lo que contestaron que por supuesto. En realidad Sam
lo que no quería era pasar demasiado tiempo en la misma casa con Giulian.
Cuando se levantó de su silla y apenas había dado un
par de pasos, el mundo empezó a girar y tuvo la sensación de estar cayendo
lentamente, unos brazos la sujetaron y no supo nada más.
Si bien Giulian no había contribuido mucho a la
conversación, sí había estado atento a cada una de sus palabras, a cada uno de
sus gestos y a cada una de sus miradas, pero ninguna había sido para él. Estaba recordando que la noche anterior no
había podido dormir y había entrado silenciosamente en la habitación de Sam.
Había pasado mucho tiempo solo contemplándola pero hubo un momento en que ella se
despertó y tuvo miedo de que lo viera, pero había tenido problemas para hacer
luz correctamente, de modo que él pudo
esconderse y escuchar con preocupación que estaba tosiendo mucho. Esperó a que
volviera a dormirse y se quedó allí hasta que casi había amanecido, le dio un
suave beso en la frente y se fue a su habitación.
La había estado observando durante todo el desayuno y
ella ni siquiera se había dignado a mirarlo y ahora anunciaba que se iba, pero
cuando se levantó, algo le sucedió y él velozmente la había sostenido en sus
brazos y la estaba colocando en un sillón.
-
¡Amy, creo que tiene temperatura!
-
No puede ser -- dijo Danny acercándose a tocarla -- yo
acabo de…
Pero era cierto, su frente estaba ligeramente caliente
y Amy enseguida se acercó a revisar a su hija. Le pasó el Athame por el cuerpo y del área del pecho salía una
intermitente luz roja, lo que significaba que el problema fuera de la
naturaleza que fuera, estaba en el pecho o los pulmones. Así se los hizo a saber
a todos aunque solo había hecho un
reconocimiento básico, porque al no ser Läkare, no podía saber con exactitud a
que se enfrentaban.
Danny tuvo un desagradable presentimiento y vio con
rabia contenida a Giulian sin que nadie lo notara, porque ellos estaban
discutiendo qué hacer antes de reanimarla. Giulian pensaba que lo mejor sería
llamar a un Läkare. Dan opinaba que tal vez fuera solo un fuerte resfriado.
Mientras que Diandra pensaba que debían llamar a Iván. Como no se ponían de acuerdo
decidieron reanimarla a ver cómo se sentía.
-
¿Qué sucedió? -- preguntó confundida
Los demás le contaron que se había desmayado y que
Giulian la había atajado justo antes de caer. Su madre le preguntó si sentía
algún malestar y la chica le dijo que no. Solo quería salir de allí y que todos
dejaran de mirarla de ese modo. Amy le dijo que mejor se quedara en casa y
descansará un poco, ya que había pescado un resfriado y como no se estaba
alimentando correctamente, quizá estaba algo débil.
-
No pienso quedarme encerrada por un estúpido resfriado mamá --
dijo molesta -- iré con Danny y
Diandra, si me siento mal prometo que te
avisaré -- terminó suavizando un poco el tono
Se despidieron y se marcharon mientras Amy, Dan y
Giulian se quedaron preocupados.
-
No debiste dejarla ir -- le decía
Giulian
-
¿Ah sí? Pues no vi que ninguno de ustedes dos pusiera objeción. ¿Por qué
no lo intentaste tú? ¿O tú? -- dijo dirigiéndose a su esposo --
Espero que se trate solo de un resfriado común, pero me preocupa lo mal
que se está alimentando, anoche no comió y supongo que notaron que ahora mismo
apenas probó el cereal.
No pudiendo hacer nada más, cada uno se retiró a hacer
lo que tenía planeado. Amy a organizar las cosas para la cena de la noche, Dan dijo
que debía ir a hablar con los encargados de los negocios de su padre, y Giulian
decidió descansar un poco, ya que la noche anterior no había dormido nada.
Los chicos pasaron una agradable tarde con los
McKenzie que estaban muy contentos de que ya hubieran regresado. Anne se pasó
casi todo el rato preguntándoles a Aderyn y a Diandra cómo se sentían con el
embarazo, mientras Danny y Gail bromeaban con Jonathan. Kenny y Will habían
pasado un momento a saludarlos pero habían tenido que marcharse pronto, sin embargo prometieron
estar a tiempo en Averdeen para la cena.
Sam había
estado sintiéndose mal desde la mañana y en la tarde la tos y el
malestar habían empeorado, pero se cuidó muy bien de mencionarlo. Ya era
bastante tarde cuando su madre envió mensaje preguntando si no pensaban ir a
casa a cambiarse, así que los cinco se despidieron y entraron al Dver. A Anne
se le hizo extraño ver marchar a sus niñas pero tendría que acostumbrarse.
Cuando Giulian
bajó al salón ya estaban en él Dan,
Amy y Sam, y la madre reñía a la hija.
-
Te digo que no estás vestida apropiadamente para la ocasión Samantha
-
Déjala en paz Amy, a mi me parece que se ve preciosa -- dijo
Dan
-
¡Dan, está casi desnuda! -- dijo Amy enfadada
Y aunque Giulian no podía estar más de acuerdo con
Dan, Amy también llevaba razón. Sam estaba preciosa con un jean a la cadera que
resaltaba espectacularmente su figura y un breve top que apenas cubría lo
necesario, pero Giulian pensó con ira en los muchos ojos que la verían aquella
noche y se sintió enfermo.
-
Colócate al menos una chaqueta niña, porque tu resfriado va a
empeorar -- estaba diciendo Amy
-
Deberías hacer caso a tu madre, princesa
-- dijo Giulian y ella lo miró
con ira
-
Nadie pidió tu opinión, Cornwall
Amy se sorprendió de escucharla dirigirse en ese tono
a Giulian, mientras que Dan lo estaba menos y Giulian simplemente se sentía
miserable pero nadie dijo nada más, porque las otras dos parejas venían bajando
y Amy dio la batalla por perdida y en realidad Amy pensó que Gail iba mucho
peor que Sam, ya que llevaba un jean que en opinión de Amy estaba en estado
lamentable y una franelilla que era directamente insultante. Danny iba un poco
mejor pero no era mucha la diferencia y las chicas estaban un poco más
cubiertas por su embarazo. Cuando llegaron Iván y Mael, Amy se preguntó por qué
razón todos tenían que vestir como cantantes de rock.
-
Vendrán nuestros amigos y ustedes lucen como si fuesen a arreglar el
jardín -- dijo con disgusto pero lo dejó hasta allí
Un rato después se presentaron los McKenzie y más
tarde llegaron Garlan, Alaric, Daira, Armel y Elar. Tuvieron una animada cena
donde Giulian notó que Sam volvía a estar desganada y solo jugueteaba con la
comida.
A Sam se le había incrementado el dolor en el pecho y
por momentos se sentía peor, de modo que una vez finalizada la cena se retiró discretamente
mientras todos charlaban en el salón. Entró al estudio y se sostuvo de un
sillón sin notar que alguien que la vigilaba atentamente la había seguido.
-
¿Qué tienes princesa? -- preguntó Giulian a sus espaldas
-
Por empezar, ganas de que dejes de seguirme --
dijo con mal humor
-
Te sientes mal -- continuo él imperturbable
-- déjame ver si …
-
No me toques -- dijo con violencia la chica al ver que se
acercaba con la mano dirigida a su frente.
-
Princesa…
-
Déjame en paz -- chilló ella
-
Deberías cuidarte más, chiquita
-
Y tú deberías dejar de perseguirme. Creo que adoptaré la sana costumbre
de cerrar la puerta de mi habitación con algún conjuro de seguridad
-
¿Crees de veras que un conjuro me detendría? -- preguntó burlón y con aquella sonrisa que
la mataba.
Ya esto era demasiado se dijo la chica. Tenía que
alejarse de él lo más rápido posible, pero en el intento de alejarse se había
tambaleado y Giulian la tomó de la cintura. Sam perdió el poco aliento que le
quedaba al encontrarse con sus ojos. Ambos, los azules y los violeta, habían
quedado clavados los unos en los otros y sin poder evitarlo los labios de
Giulian descendieron sobre los de Sam. Por un momento el mundo dejó de girar
pero al siguiente Sam se separaba abofeteando con furia a Giulian e
inmediatamente después le rodeaba el cuello con sus brazos y le ofrecía de
nuevo sus labios.
Giulian se sentía como si estuviera girando en el
espacio a velocidades extremas ¿Acaso aquella pequeña inmisericorde pretendía
enloquecerlo? La aferró con fuerza y la besó con brutalidad, cuando sintió que
los pequeños dedos de ella se enredaban en su cabello suavizó el beso y en una
pequeña parte de su cerebro se encendió una señal de alarma, porque la piel de
la chica estaba en exceso caliente, pero cuando deslizaba su mano por la
espalda de Sam, la puerta se abrió con violencia dando paso a un furioso Danny.
-
¡Suéltala! -- le gritó e inmediatamente sacó su Athame
Giulian y Sam separaron sus labios pero él seguía
abrazándola.
-
¡Te he dicho que la sueltes! --
exclamó Danny en forma amenazante
-
Danny… -- intentó Sam
-
¡Apártate Samantha!
Giulian la alejó y se enfrentó a Danny. Los gritos
habían atraído a los demás y Amy los miraba con consternación mientras Dan
estaba petrificado al ver la situación. Los demás no entraron al estudio pero
estaban todos en la puerta.
-
¿Qué está pasando aquí? --
preguntó Dan -- ¡Baja tu Athame Danny!
-
No papá, y no quiero que nadie intervenga.
Diandra había entrado también y miraba suplicante a su
esposo.
-
Danny, en otras ocasiones me han amenazado y no he hecho nada aun siendo inocente.
¿Crees que lo haría ahora sabiendo que soy culpable?
Sam vio formarse la determinación en la mente de su
hermano y se interpuso
-
¡Danny no…! -- pero no pudo decir más porque perdió la
consciencia.
Giulian la aferró contra su pecho y la recostó en el
sillón, pero la chica ardía con la fiebre y Giulian se volvió
hacia Danny.
-
Tendrás que matarme después Danny
-- dijo con tristeza, y volviéndose hacia su amigo --
Iván pronto, tenemos que hacer
algo, Sam está hirviendo con la fiebre.
La cargó y se desaparecieron hacia el cuarto de la
chica. La acostó en la cama y enseguida aparecieron Mael y Amy que corrieron
hacia ellos. Unos momentos después entraban Anne y Aderyn, ya que Diandra y
Gail se habían quedado con Danny. Amy conjuró un paño muy frío y se lo colocó
en la frente a su hija. Nadie hablaba mientras Iván la examinaba, pero tanto
Anne como Amy se preguntaban en silencio qué había estado ocurriendo en el
estudio. Aderyn en cambio tenía una idea bastante aproximada y no dejaba de
mirar a Giulian, mientras que Dan hacía trabajar su cerebro a toda marcha. Él
había supuesto que las cosas entre Sam y Giulian no serían fáciles de resolver,
sobre todo teniendo en cuenta el carácter de Samantha, pero en su ecuación no
estaba incluido Danny.
-
Dan -- dijo Iván
-- debemos traer un Läkare
-
¿Por qué?
-
No puedo con esto, ella necesita atención especializada y es urgente
Giulian sintió que el mundo giraba sin control,
aquello no podía estar sucediendo. Dan miraba a Iván como reprochándole el no
ser capaz de ayudarla, de modo que quien reaccionó fue Mael.
-
Yo iré por el Läkare -- escuchó Iván y asintió
Aproximadamente quince minutos después, regresó Mael
en compañía del Läkare. Este les pidió a
todos que salieran y así lo hicieron. Giulian se recargó en la pared y se
deslizó hacia el piso con las manos en la cabeza. Todo era su culpa, recordó
que hacía un tiempo atrás, Sam había pasado varios días mal con fiebre muy alta
y todo a causa de un trastorno emocional, y ahora él lo había provocado de
nuevo. Aderyn que no había dejado de
vigilarlo se inclinó hacia él.
-
Supongo que no estarás culpándote de esto ¿verdad?
-
Claro que sí -- contestó abatido -- todo es culpa mía. Ella es así, si tiene
un problema emocional su cuerpo lo manifiesta de esa forma, Alan me lo dijo en
otra oportunidad.
-
Pues ya sabes cuál es la solución
-- dijo la chica -- resuelve las cosas de una vez.
Mientras, Anne intentaba tranquilizar a Amy pero en ese momento se presentó Gail.
-
¿Amy, puedes bajar? -- preguntó
-- Daira lo está atendiendo pero
Danny tiene fiebre también.
Amy miró la puerta de la habitación de su hija y luego
hacia las escaleras. Dan vio el dilema de su esposa y se acercó a ella.
-
Ve con Danny, yo me quedo aquí
-- le dijo
Cuando Amy bajó, Daira estaba inclinada sobre Danny e
intentaba darle un brebaje para la fiebre. Amy se inclinó sobre su hijo y
comprobó que en realidad estaba ardiendo.
-
Será mejor subirlo a su habitación
-- dijo Daira -- con
lo que acabo de darle, la fiebre debería remitir en breve
Gail y Mael ayudaron a Danny a levantarse pero como éste
apenas si podía tenerse en pie, Mael le dijo a Gail que se apartase y levantó a
Danny trasladándolo de inmediato a su habitación. Dan se apresuró hacia la
habitación de su hijo y se sintió muy consternado al ver el estado en el que se
encontraba, pero después de que se aseguraron de su comodidad lo dejaron con
Diandra.
-
¿El Läkare aún no ha dicho nada?
-- estaba preguntando Gail a
Aderyn
-
No, aún no ha salido -- le contestó ella que seguía al lado de
Giulian -- ¿Qué le pasó a Danny? ¿Lo de siempre?
-
En realidad no sé, apenas Giulian
desapareció con Sam, Danny se tambaleó y cayó al piso. No se desmayó pero casi.
Cuando lo ayudamos a sentarse me di cuenta de que estaba ardiendo y supuse que
era lo usual, pero recordé aquella vez en que Sam tuvo una fiebre alta y a Danny
también le dio, solo que en esa oportunidad la fiebre de Danny fue muy leve.
Además ya él controla mejor esa conexión
-- y miró a su esposa esperando
que ella pudiera darle la respuesta a lo que iba a preguntar -- ¿Por
qué?
-
No lo sé -- y ella miró a su vez a su suegro -- ¿Iván?
-
Solo puedo hacer conjeturas y como no estoy seguro de nada es mejor que
esperemos a que sea examinado también
-- les dijo él
Giulian empezó a pasearse por el pasillo, tenía los
nervios hechos trizas. ¿Por qué tardaba
tanto en salir el condenado Läkare?
Anne se había hecho cargo de despedir a los Arzhaelíes
y a los miembros de su familia. Como Jonathan no quería marcharse, Will se fue
con Liz. Kenny y Anastasia debían marcharse por Aelig, pero el chico se llevó
aparte a Jonathan y le suplicó que lo mantuviese informado. Después que todos
se habían marchado, Anne y Jonathan subieron en compañía de Elar y Garlan que
tampoco habían querido irse.
Dan y Amy entraban y salían del cuarto de su hijo en
quien la fiebre aun no cedía a pesar de lo
que había dicho Daira. Por fin después de mucho esperar, salió el Läkare
y su cara era de consternación cuando se dirigió a Dan.
-
Señor Douglas, he hecho todo cuanto podía hacer aquí pero lo que su hija
tiene es una neumonía aguda. Esto es una
inflamación del tejido pulmonar, este tejido se enrojece, se inflama y se torna
doloroso.
-
¿Es algo grave? -- preguntó Dan mientras Amy miraba a Iván
-
Con el tratamiento y los cuidados adecuados, puede recuperarse --
dijo el hombre
-
¿Por qué? -- volvió a preguntar -- Es decir ¿cómo pudo contraer algo así? ¿Y
cómo no nos dimos cuenta?
-
Eso es un virus señor -- le
aclaró el hombre -- quizá estuvo
expuesta a ambientes muy contaminados. En cuanto a los síntomas, sí es extraño
que no los notaran, debió presentar tos, falta de apetito, mareo y por supuesto
mucha fiebre.
Amy estaba furiosa consigo misma ¿Cómo era posible que
no lo hubiera notado? E Iván lo estaba mucho más y se reprochaba por no haber
insistido en examinarla la noche anterior.
-
Mi opinión profesional es que sea trasladada a Edernez ahora mismo. Como
les dije, hice todo lo que pude aquí y por el momento, pero estará mucho mejor
allá. Segundo, todos deben tomar lo que les voy a recetar para evitar el riesgo
de contagio.
-
Necesitamos que revise por favor a nuestro otro hijo -- dijo Amy
-- tiene mucha fiebre también, aunque no ha presentado ninguno de los
síntomas que nos describió.
El Läkare asintió y se dirigió a la habitación de Danny,
pero de ella salió mucho más rápido.
-
No puedo decirles el origen de la fiebre de su hijo -- les informó
-- pero puedo asegurarles que no se trata de lo mismo. Me atrevo a
pensar que es porque son gemelos. Es posible que experimente el malestar e incluso
algunos de los síntomas como la fiebre, pero por el momento está sano.
Giulian hasta el momento no había dicho nada, porque
por su mente corrían locas y aterradoras
ideas. Sam “tenía” que ponerse bien y con paso decidido se dirigió a la
habitación de la chica.
-
Espere -- dijo el Läkare -- no deberían tener contacto con ella hasta
tanto no se hayan bebido lo que voy a darles, porque corren el riesgo de…
-
¡Al demonio con los brebajes y los riesgos! -- le
gritó -- Solo quiero verla y lo haré
tanto si usted quiere como si no.
Y pasando frente al asombrado individuo y la
estupefacción de los demás, entró a la habitación. Una vez dentro toda su furia
se quedó del otro lado de la puerta. Se acercó a la cama y se arrodilló al lado
tomando las manos de Sam con delicadeza y allí se pensaba quedar.
Paquetazo del viernes con varios capitulos en un dia!
ResponderEliminarQue tristeza q las cosas no pinten bien para Mael, yo si me quedo con el :'(
Saludos!!!! Nos leemos en el proximo capitulo :)