LMA 3

LMA 3
La vida que habían vivido hasta ahora había sido peligrosa pero nunca se sentaron a ver lo que sucedía, sino que participaron activamente en todo ello. Ahora tenían que reconstruir sobre las cenizas de la tristeza y de la pérdida, y para poder seguir tenían que comenzar todo de nuevo. Nunca nada sucede como suponíamos o como teníamos previsto pero siempre el universo nos brinda una nueva oportunidad. La vida les había dado mil razones para llorar pero ahora se disponían a encontrar otras mil para reír, debían dejar descansar a los que se habían ido pero siempre tendrían un lugar en el recuerdo y en el corazón de todos, y disponerse a comenzar… Una nueva vida

lunes, 30 de junio de 2014

Cap. 10 La Entrevista…



Ya el hecho de que la entrevista no se hubiese realizado en el Despacho de Peter, les había llamado la atención. Los chicos que no conocían más que el vestíbulo del Edificio del Consejo, no tenían idea de a dónde se dirigían, pero cuando Dan e Iván notaron que se dirigían al Auditorio, se miraron con extrañeza, pero esta alcanzó los niveles más altos cuando Peter abrió las puertas y vieron el lugar lleno de gente. Toda el ala derecha estaba repleta mientras que la izquierda estaba vacía. No obstante, no hubo tiempo para preguntarse la razón de ello, porque apenas ellos hicieron su entrada, las cámaras comenzaron a dispararse.
-         ¡Peter!  --  susurró Dan en forma apremiante  --  Dijiste que…

-         Lo siento, pero ayer en la tarde comenzaron a llegar cartas de todas partes del mundo pidiendo asistir, no sé cómo se enteraron pero no me podía negar, no solo son periodistas sino Läkares también.

Sam se había tensado, porque si le molestaban dos periodistas, aquel centenar de ellos no la hacía sentir mucho mejor. Sin embargo, sintió el protector brazo de Giulian sobre sus hombros y se tranquilizó. Peter los condujo hasta el estrado donde había sido colocada una mesa con varias sillas y donde ya se encontraban los restantes miembros del Consejo provisional. Danny se sentó al lado de su madre y Sam al lado de Dan. Giulian lo hizo al lado de ella y entre él e Iván se sentó Gail.

Las cámaras seguían funcionando y el murmullo era ensordecedor. Los chicos se estaban preguntando dónde estaban las McKenzie y Mael cuando se abrieron de nuevo las puertas, el murmullo cesó de forma automática y las cámaras dejaron de funcionar. Eowaz entró a la cabeza de la ordenada e impresionante formación del Cuerpo de Arzhaelíes al completo, y tras ellos venían tres destacamentos de Krigers, uno comandado por Jason, el otro por Urs y el tercero por Mael.

Una vez que ocuparon sus lugares, Eowaz, Jonathan, Mael y las McKenzie, se desprendieron de sus respectivas formaciones y subieron al estrado ocupando las sillas que habían sido destinadas para ellos. En cuanto lo hicieron, Peter se puso de pie para dirigirse a la concurrencia.

-         Buenas tardes y bienvenidos damas y caballeros. Les agradezco mucho su interés y su presencia hoy aquí, del mismo modo que quiero hacer público y extensivo mi agradecimiento en la persona del señor Eowaz O’Malley y a nombre de toda la comunidad Arzhvael, a la Orden Arzhaelí por haber aceptado nuestras disculpas por el trato que recibieron durante los dos últimos años y por aceptar de nuevo hacerse cargo de la seguridad de nuestro pueblo  --  hizo una pausa y luego continuó  --  También debo agradecer a los Douglas por haber accedido a conceder esta entrevista solicitada por ustedes. Y ahora, queda abierta la ronda de preguntas.

Peter se sentó y se puso de pie un hombre que sin duda era el enviado de El Heraldo.

-         Mi nombre es Ziarist Dziennikarz  --  dijo identificándose y confirmando de ese modo lo que habían pensado  --  Señor Douglas, nos gustaría saber ¿Dónde estuvo durante los últimos dieciséis años y por qué se le dijo a la comunidad que usted y su esposa estaban muertos?

-         Mi esposa y yo permanecimos durante ese lapso de tiempo como prisioneros de Bastian O’Neill  --  dijo Dan  --  Dígame algo señor Dziennikarz ¿Qué habría dicho usted si alguien desaparece por un período de tiempo similar?  --  le preguntó traspasándolo con la mirada

-         ¿Ustedes también piensan que Bastian O’Neill y Nurión eran la misma persona?  --  intervino otro reportero sin identificarse

-         No señor  --  dijo Amy  --  no lo pensamos, es algo de lo que estamos absolutamente seguros.

-         Mi nombre es Albert Johnson  --  dijo un individuo con acento norteamericano  --  ¿Tienen pruebas que sustenten lo que dicen?

-         Todas las que quiera, pero básicamente yo era su nieta, de modo que puedo asegurárselo.

-         No es nuestra intención dudar de su palabra señora Douglas, pero como comprenderá ella por sí sola no constituye una prueba concluyente  --  insistió el sujeto

-         Es posible, pero por el momento tendrán que conformarse con ella  --  dijo Amy

-         Buenas tardes, mi nombre es Ingrid Schorder  --  dijo una rubia poniéndose de pie y en seguida fue reconocida por Sam

Giulian también la identificó de inmediato y sintió una desagradable opresión en el estómago. Era la chica con la que había estado bailando la noche anterior.

-         Puede decirnos al menos  --  seguía diciendo la chica  --  ¿Con qué fin los mantuvieron cautivos por todo ese tiempo?

-         No, es algo que no podemos decir de momento  --  dijo Dan

-         Por lo visto es mucho lo que no quieren decir  --  dijo ella  --  ¿No creen que la comunidad tiene derecho a saberlo? Después de todo están acusando a alguien que fue un ciudadano respetable de la comunidad Arzhvael e incluso Presidente del Consejo de Estado.

-         En primer lugar, no es que no queramos decirlo señorita, y en principio estoy de acuerdo con usted, pero solo cumplimos con las leyes. Y en segundo lugar, ese ciudadano respetable, no era más que un asesino inmisericorde y un megalómano.

Una vez dicho aquello, se elevó un murmullo generalizado, pero guardaron silencio cuando otro periodista se puso de pie.

-         Mi nombre es Ettiene Dubois. Están haciendo acusaciones muy graves, y siendo que no están dispuestos a presentar pruebas ¿Cómo esperan que la comunidad acepte todo eso como cierto?

-         En realidad gran parte de las pruebas son de dominio público  --  y ahora fue Iván el que intervino  --  Si se toman el trabajo de revisar las leyes que fueron promulgadas y las muchas otras que fueron derogadas y sustituidas por unas muy aberrantes y que suprimían muchos de los derechos de los ciudadanos; si revisan las estadísticas de la cantidad de personas que se vieron obligadas a abandonar sus países y a pedir refugio para salvar sus vidas; si realmente se toman su trabajo en serio y realizan esa investigación, no necesitaran pedir más pruebas.

Se hizo un breve silencio, no se sabía si porque los reporteros estaban avergonzados de que los mandasen a hacer su trabajo con seriedad, o porque seguían temiendo a Iván.

-         Mi nombre es Andrei Friedman  --  dijo otro sujeto  --  Fangelsi está abarrotado de prisioneros Nemhain, pero no se nos permite entrevistar a ninguno. Sin embargo, esos prisioneros tienen familia y algunos de ellos han accedido a hablar con nosotros. Señor Cornwall ¿Es cierto que su hermana no está muerta y que formaba parte de los seguidores de Bastian O’Neill?

Giulian sintió que una mano de hierro apretaba su corazón, pero al mismo tiempo, una mucho más cálida presionó su mano tranquilizándolo.

-         Es cierto, pero ahora sí lo está  --  dijo con voz helada

De nuevo se hizo el silencio y todos notaron que muchos de los periodistas miraban a Iván, pero parecían no decidirse a preguntar. Sin embargo, la chica sueca volvió a ponerse de pie e Iván se preparó para lo que venía.

-         Señor Natchzhrer, yo también he podido hablar con algunas personas, y según lo que me han dicho, fue usted quien mató a su esposa ¿Puede decirnos si eso es cierto?

-         Sí, es cierto, yo lo hice  --  las cámaras se dispararon en forma enloquecida en ese momento

-         Mi nombre es Newyddia Irisseoir y mi pregunta es para el señor Natchzhrer… hijo  --  dijo la mujer con una sonrisa maligna  --  ¿Qué sentiste al ver a tu padre dar muerte a tu madre?

Sam sintió que sus apellidos se revolvían y Danny se llevó la mano al bolsillo pero su madre lo detuvo. No obstante, nadie pudo detener a Sam y en realidad nadie habría podido, porque a pesar de que no movió ni un músculo, todos vieron como la periodista comenzaba a sangrar profusamente por la nariz y a ninguno de ellos le quedó ninguna duda de quién era la responsable aunque no se explicaban el cómo, porque si bien era cierto que todo Arzhvael era capaz de hacer magia sin una canalizador, eran cosas simples y no lo que estaban viendo en aquel momento. Sin embargo, aquella arpía no se daría por vencida tan fácilmente.

-         Estamos esperando su respuesta  --  dijo mientras intentaba detener la hemorragia

-         No creo que mis sentimientos sean de interés público  --  dijo Gail con tranquilidad  --  pero no me cuesta nada satisfacer su morbosa curiosidad y le agradecería que por una vez en la vida, se esforzara en publicar  lo que voy a decir palabra por palabra y no lo que a usted le parezca  --  puntualizó antes de continuar  --  Cuando mi padre le arrancó la piedra que tenía por corazón mi dulce madre, sentí que se estaba haciendo justicia, porque esa mujer mató a mi tía que fue la única madre que conocí, ya que la mía me abandonó e intentó matarme en dos ocasiones. Así que como comprenderá o quizá no, no podía sentir nada por ese monstruo.

Después que los murmullos cesaron y que varios sujetos ayudaron a Newyddia con su hemorragia, otro individuo se puso de pie.

-         Mi nombre es Stuart Bentley y no soy periodista, soy un Läkare de Edernez. Señor Douglas, en la comunidad circulaban rumores desde  hacía mucho tiempo con relación a que Nurión poseía un Laboratorio de experimentación donde llevaban a cabo estudios genéticos. Asumiendo y aceptando como cierto, que Nurión y Bastian O’Neill eran la misma persona, ¿puede decirnos si era allí donde los tenían?

-         Sí, era allí  --  pero fue Eowaz quien contestó en esta ocasión

-         ¿Qué clase de estudios les practicaron?

-         No lo sabemos  --  dijo Dan

-         ¿Cómo es posible que no lo sepan?  --  preguntó Ziarist

-         Los recuerdos fueron suprimidos de nuestras memorias  --  contestó Amy

-         Que conveniente  --  dijo Newyddia

-         Pero yo sí tengo memoria --  dijo Giulian  --  y si tanto le interesa saberlo yo puedo decírselo, porque también fui huésped involuntario de ese sádico y su equipo de desquiciados que se hacían llamar científicos. Esos individuos sentían especial predilección por utilizar los cuerpos de sus sujetos de investigación para probar su resistencia a diferentes virus. Quebrar nuestros huesos una y otra vez, o quemar nuestra piel para comprobar la efectividad y la rapidez con la actuaban los conjuros con los que experimentaban. Someternos a temperaturas extremas para averiguar cuánto podía soportar el organismo antes de detener su funcionamiento. Manipular las células de diferentes razas para ver qué aberrantes criaturas podían obtener ¿Quiere que continúe?

Muchos de los reporteros tenían mal aspecto, los Läkares presentes lucían aun peor y Amy que no había escuchado nada de eso, lloraba en silencio. Después de un momento, se puso de pie el Delegado de Justicia.

-         Señores si me permiten y en vista del interés que han mostrado en asuntos que no han podido ser respondidos, les informo que toda esa información estará disponible una vez que se inicien los juicios en contra de todos los que permanecen detenidos.

-         ¿Y cuándo será eso?  --  preguntó Ziarist

-         La semana próxima, y serán por supuesto audiencias públicas.

Después de eso se puso de pie una chica.

-         Mi nombre es Wanda Spencer. Señor O’Malley, ¿Cómo supieron que los Douglas seguían con vida después de tantos años?

-         No lo sabíamos, en realidad quien lo descubrió fue el señor Mael Berserker. Él y la señorita Douglas fueron secuestrados, los miembros de nuestra Orden realizaron un arduo trabajo para localizarlos y una vez efectuado el rescate, el señor Berserker con ayuda de los señores Jason Walker, Jonathan y Kenneth McKenzie, efectuaron la extracción de los Douglas.

-         Mi pregunta es para Daniel hijo  --  intervino Ziarist de nuevo  -- ¿No crees que si hubiesen accedido a irse con su abuelo, todo esto podría haberse evitado?

-         ¿No ha estado usted prestando atención?  --  preguntó él a su vez con su proverbial impaciencia  --  Ese hombre nos quería muertos, nosotros estuvimos al lado de los que realmente nos amaban y se preocupaban por nosotros, los que son y siempre serán nuestra verdadera familia.

-         Cuando dices tu familia…  --  dijo Ziarist dejando la frase inconclusa

-         Me refiero a los Natchzhrer, los Cornwall, los McKenzie, Mael Berserker, Eowaz O’Malley y todos y cada uno de los miembros de la Orden Arzhaelí.

-         ¿Perdiste a alguien especial en la confrontación?  --  preguntó de nuevo la chica que se había identificado como Wanda

-         Quiero que les quede claro que todas las personas que perdieron sus vidas en esta locura fueron y seguirán siendo especiales, pero sí, debo destacar entre ellas a Vladimir Cornwall que fue amigo, guía y protector, a Eveska Natchzhrer Cornwall que fue la madre que el desgraciado de Bastian nos quitó. A Albert Leomer que dio su vida por proteger las de todos nosotros y a Peter McKenzie quien fuera un hermano para nosotros.

En el Auditorio se hizo un respetuoso silencio que fue roto por Newyddia.

-         Pero se dice que ustedes no fueron más que los títeres y los peones del juego de las locuras de los Natchzhrer, los Cornwall y Eowaz O’Malley

Se hizo un denso silencio muy distinto al anterior. Solo alguien como Newyddia podía decir algo como aquello. Danny sintió que toda su sangre se agolpaba en su cerebro, pero escuchó: Déjamela a mí, llegó la hora de ponerla en su lugar.

-         Tal vez para alguien como usted  -- empezó Sam  -- para quien las palabras sinceridad, lealtad, comprensión y misericordia no significan gran cosa, para quien el amor al prójimo es solo una frase bonita porque desconoce por completo el significado de la palabra amor. Para alguien incapaz de tener un gesto desinteresado, capaz de inventar mentiras para vender ejemplares, capaz de desacreditar a personas decentes en busca del beneficio propio. Para alguien cuyos sentimientos son tan cálidos como el más frío invierno, alguien que por su capacidad de destruir en vez de construir está más cerca de Bastian que del resto de la humanidad, tal vez le sea posible pensar de esa manera, porque solo alguien como usted es capaz de ver traición donde hubo amor, ver manipulación donde hubo sacrificio. ¿Qué sacrificó usted en esta lucha? ¿Acaso siquiera estuvo cerca de alguna de las muchas batallas que tuvimos que librar? ¿Vio morir a sus amigos y sintió la impotencia de no poder ayudarlos? ¿Qué hacía usted  mientras nuestro mundo sufría los horrores de una guerra, mientras se destruían familias, mientras los padres veían morir a sus hijos, mientras los hijos perdíamos a nuestros padres, mientras nuestros amigos caían a nuestro alrededor o daban sus vidas por defendernos? ¿Qué hacía usted mientras  la violencia que destrozó a mi familia y a muchas otras seguía su curso? Yo le voy a contestar.  Usted hizo lo único que ese perverso trozo de hielo que tiene por corazón le permitió. Usted solo hizo dinero  --  en ese momento Sam se puso de pie  --   Así que de ahora en adelante, le aconsejo que elija con mucho cuidado los adjetivos que utilice para hablar de Iván Natchzhrer, cuya capacidad de amar está mucho más allá de lo que nadie pueda imaginar, ese fue el hombre que renunció a su hijo por amor a toda la humanidad. O de Eveska Natchzhrer, que dedicó su vida a defender aquello en lo que creía hasta el punto darla por ello. O de Vladimir Cornwall, que vio morir a casi toda su familia a manos de un loco peligroso que hizo hasta lo imposible por destruirnos a todos y finalmente también dio su vida por defender la nuestra y proporcionarnos a todos la posibilidad de vivir en mundo mejor. O de Eowaz O’Malley, que pasó más de cien años intentando proteger al mundo del mismo individuo. Y sobre todo tenga mucho, pero mucho cuidado al referirse a Giulian Cornwall que pasó trece años sufriendo el sadismo de Bastian O’Neill, por amor a los suyos e incluso a gente como usted que tienen la desvergüenza de calificarlo de loco. Y en suma, cuídese mucho al hablar de cualquier miembro de mi familia si no desea sufrir unas dolorosas consecuencias.

Sam traspasaba a Newyddia con la mirada y hay que decir que aquello en condiciones normales era algo que ponía nervioso a cualquiera, y si estaba furiosa definitivamente desataba el terror en quien fuese el destinatario de ella. La mujer la miraba a su vez con mudo asombro y repentinamente el cuaderno y el lápiz con el que se suponía debía estar tomando nota de lo que decían los entrevistados, comenzó arder en llamas y Newyddia comenzó a sangrar nuevamente. El Salón se había quedado en un silencio igualmente asombrado y de pronto los Arzhaelíes se pusieron de pie y un gran aplauso estalló. Samantha Douglas acababa de destronar a su madre en cuestiones de poner en su lugar a cualquiera y había demostrado un frío control para ello. Con aquella explosiva intervención de Sam, la entrevista se dio por finalizada.

Los Douglas estaban desmedidamente orgullosos de sus hijos, ambos habían estado brillantes en sus intervenciones y habían impreso en cada palabra el amor y el respeto que les inspiraban todos. Pero Iván fue el primero en acercarse a Sam con los ojos llenos de lágrimas y apresarla en un fuerte abrazo.

-         Por ti volvería a hacerlo todo mil veces más, y aunque sé que tienes un padre, nadie podrá quitarme nunca el derecho que me has dado a llamarte hija.

Aunque la entrevista había finalizado, las cámaras seguían disparándose enloquecidas y todos querían acercarse a ellos. Después que Iván se separó de Sam, Giulian se acercó a ella.

-         Gracias princesa, pero como he dicho siempre, estuve, estoy y estaré dispuesto a dar mi vida por ti  --  y luego agregó sonriendo  --  Y sinceramente espero nunca incurrir en tu ira, porque eres realmente peligrosa  --  dijo  pasándole un brazo por los hombros cuando se pusieron en marcha

Todos comenzaron a caminar hacia la salida, custodiados por un cordón de Krigers para evitar que se les acercaran. Cuando ya casi habían alcanzado la puerta, la chica sueca le gritó a Giulian.

-         ¿Me permite unas palabras señor Cornwall?

Sam palideció y soltándose del brazo de Giulian se alejó alcanzando a sus padres.

-         No me dijiste que eras un Arzhaelí, y menos aun que eras uno de los protagonistas de esta historia.

-         Tú y yo sabemos que eso era innecesario, lo supiste en cuanto escuchaste mi nombre

-         ¿Por qué iba a saberlo?

-         Eres una periodista, así que sin duda estabas perfectamente al tanto que mi cabeza tenía precio.

-         Y uno muy alto  --  reconoció finalmente  --  Pero ahora que sabemos quiénes somos ¿tendré más posibilidades de obtener tu atención?

-         Giulian  --  dijo Danny aclarándose la garganta  --  lamento la interrupción pero me enviaron a decirte que te esperamos en el despacho de Peter

-         ¡Vaya, Daniel Douglas!  --  exclamó la chica  --  ¿Me concederías una entrevista en exclusiva?

-         No, y la verdad es que no me agradan mucho los periodistas  --  dijo él con su habitual y desagradable franqueza, hizo un gesto de despedida y desapareció entre la multitud

-         Pero bueno  --  dijo Ingrid con sorpresa  --  ¿Qué les sucede a los hombres de este país?

-         Nada, solo que has escogido a dos a quienes la publicidad no atrae  --  le contestó Giulian

-         ¿Entonces?  --  preguntó la rubia  --  No contestaste a mi pregunta. Soy una extranjera en tu país y me complacería mucho tu compañía como guía.

-         Lo siento, pero en realidad estoy muy ocupado  --  le dijo dedicándole una de sus encantadoras sonrisas, lo que impulsó la determinación de la chica

-         Pero en algún momento comerás o… dormirás, y no me importaría que fuese en mi cama

-         De veras me siento muy honrado por tanto interés, pero en verdad debo irme.

-         Debe ser alguien muy especial para haberse ganado esa fidelidad tan imperturbable de alguien que como tú tiene fama de ser el mayor coleccionista de chicas.

Giulian la miró un momento pero decidió no seguir perdiendo el tiempo con aquella irritante mujer. De modo que hizo un gesto de despedida y se alejó. Sin embargo, Ingrid no se caracterizaba por dejar un trabajo a medio hacer, y si bien era cierto que Giulian Cornwall era un sujeto muy atractivo lo que habría hecho de su trabajo algo más bien agradable, debía encontrar otra forma de acercarse a los Douglas, porque esa era una historia que sería muy bien pagada. Miró a su alrededor y divisó a Eowaz pero decidió que siendo el Jefe de aquellos sujetos, resultaría muy improbable que lograse algo con él. Intentó acercarse a Jonathan pero el chico cambió rápidamente de dirección colocándose al lado de Eowaz. Vio a Garlan y a Alaric, y una sonrisa se dibujó en sus labios mientras se encaminaba hacia ellos.

-         Buenas tardes  --  saludó con coquetería  --  ¿Me permiten un momento?

En ese momento ambos estaban riendo por algo que había dicho Armel antes de retirarse con relación a que Samantha parecía ser la versión corregida y mejorada de su madre, pero al ver a la mujer, sus sonrisas se borraron inmediatamente.

-         Caballeros, entiendo que son ustedes Arzhaelíes  --  comenzó  --  y entre los muchos derechos que defienden, está el de la libertad ¿no es así?

-         Así es  --  dijo Alaric

-         Entonces estarán de acuerdo conmigo en que la comunidad tiene derecho a estar informada y nosotros en libertad de buscar esa información para proporcionárselas.

-         Señorita, nos ahorraríamos tiempo si dijese en forma directa lo que desea decir  --  dijo Garlan

Ingrid sonrió y se dijo para sus adentros que aquellos no eran escolares a los que pudiese manejar con facilidad.

-         Toda la comunidad está muy interesada en conocer la historia de los Douglas, pero parece imposible acercárseles y lo entiendo teniendo en cuenta por todo lo que han tenido que pasar, de modo que la mejor forma de obtener la verdad, es de las personas más cercanas a ellos  --  hizo un pausa y luego preguntó  --  ¿Me concederían ustedes una entrevista?

-         ¿Por qué íbamos a hacerlo?  --  preguntó Garlan

Alaric lo miró con fastidio, desde el inicio sabían que no le dirían nada a aquella mujer, pero Garlan definitivamente por mucho que se hubiese quejado de Vladimir, era exactamente igual a él en eso de fastidiar a los demás.

-         Porque nadie más indicado  --  contestó la chica  --  Ustedes los conocen y sin duda están perfectamente al tanto de todo lo sucedido. Tenemos mucho interés en saber más acerca de lo que sufrieron los padres y de la vida de los hijos. Se ha especulado mucho con relación a los gemelos, desde la duda de que fuesen quienes decían ser, hasta sus posibles conexiones con la energía negativa.

-         ¿Tiene usted alguna duda de que los gemelos Douglas sean exactamente quiénes son?

-         Bueno, a estas alturas eso está más que aclarado, es evidente el parecido con su padre, pero con respecto a lo otro…

-         Escuche señorita, pierde usted su tiempo de la forma más miserable. Sí, es cierto que defendemos la libertad y los derechos de todos, pero también defendemos el derecho a la privacidad. La comunidad tendrá acceso a toda la información que sea de interés público, podrán asistir a los juicios y leer los expedientes una vez que los casos sean ventilados, pero con respecto a las vidas privadas de cualquiera de nosotros, es terreno donde nadie tiene derecho a inmiscuirse. Y si me permite, es francamente decepcionante la forma en que desvirtúan personas como usted, como Ziarist Dziennikarz y Newyddia Irisseoir, la profesión que ejercen. Disfrazan y esconden tras el derecho a la información, su morbosa curiosidad en asuntos que no les incumben. Y si se toma usted la molestia, sabrá que ningún Arzhaelí podría estar vinculado a la energía negativa, de modo que le sugiero tener mucho cuidado al hablar de los gemelos Douglas en esos términos. Ahora con su permiso, tenemos cosas verdaderamente importantes qué hacer.

Ingrid se quedó de una pieza, verdaderamente aquellos sujetos eran muy difíciles pero debían tener alguna debilidad y por lo poco que había visto y escuchado, esa debilidad tenía nombre y apellido. Razón por la cual lamentó de nuevo no haber tenido acceso a Giulian Cornwall, porque estaba especialmente interesada en Samantha Douglas y todos parecían dispuestos a alzarse frente a ella para protegerla, pero protegerla de qué exactamente era lo que entre otras cosas quería saber. Después que su minucioso trabajo de investigación la había empujado en aquella dirección, no pensaba detenerse y haría lo que fuese necesario para conseguirlo. Se dio vuelta y se encontró de frente con unos brillantes ojos esmeralda. Después de la primera impresión, reconoció al guapísimo Mael Berserker y vio el cielo abierto, pero sería algo que no le duraría mucho.

-         Asumo que sabe quien soy  --  dijo él

-         ¡Por supuesto!  --  dijo ella emocionada

-         Bien, porque así nos ahorramos tiempo  --  la tomó por un brazo y prácticamente la arrastró hacia la salida, y una vez a las puertas del edificio, se detuvo  --  Solo para dejar las cosas suficientemente claras, soy un Berserker, por definición eso me hace un sujeto altamente peligroso, tengo instinto, buena memoria y el mejor entrenamiento, podría localizarla en cualquier lugar donde decidiese ocultarse, porque carece usted de la adecuada formación para esconderse de alguien como yo. De manera que diré esto solo una vez, si publica usted una sola línea que involucre de cualquier manera a Samantha Douglas, en bien o en mal, solo con mencionarla, estará firmando usted una segura sentencia de muerte ¿Me he expresado con suficiente claridad?

Por un momento Ingrid no supo qué decir y ni siquiera qué pensar. Aquel hombre le había hablado de la forma más serena posible pero había impreso cada palabra con el sello de una amenaza, y eso fue lo único que se le ocurrió decir.

-         ¿Me está amenazando?

-         No, le estoy jurando que si la menciona solo una vez, la buscaré a usted y la haré pedazos.

-         No puede…

-         Yo en su lugar no intentaría averiguarlo  --  y esta vez los ojos de Mael adquirieron aquel peligroso brillo que todos los que lo conocían habían aprendido a temer  --  Pregunto de nuevo señorita ¿Ha entendido con claridad?  --  y ella se limitó a asentir  --  Bien, entonces váyase

Mael le dio la espalda y comenzó a caminar hacia donde lo estaban esperando, pero se detuvo y volvió la cabeza para mirar a la mujer que aún estaba clavada en el mismo lugar y lo miraba con los ojos muy abiertos.

-         Una última cosa señorita Schorder, siempre cumplo con mis juramentos, no lo olvide.


Y sin duda ni sus palabras ni su mirada, sería algo que pudiese olvidar fácilmente, y que atormentaría sus sueños durante mucho tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario